Tuxpan, Ver. – La emoción de ver el mar por primera vez se transformó en el último recuerdo de una pequeña de tan solo siete años, cuya vida se apagó en medio de un viaje que prometía risas, descubrimientos y felicidad. Era viernes por la tarde cuando el paseo organizado por una casa de asistencia infantil de la Ciudad de México terminó en tragedia, luego de que la menor muriera ahogada en la playa de este puerto veracruzano.
La niña, residente del albergue “Hogares Providencia”, formaba parte de un grupo de niños que había viajado hasta Tuxpan como parte de una actividad especial. Para ella, el mar no era solo agua y arena: era un sueño largamente esperado, una postal que había imaginado sin saber que sería la última.
A eso de las 17:00 horas, entre juegos y risas, su ausencia comenzó a notarse. En cuestión de minutos, la atmósfera cambió de algarabía a alarma. Voluntarios, turistas y personal del albergue iniciaron una frenética búsqueda que culminó con el hallazgo del cuerpo de la menor flotando entre las olas del Golfo de México. Los esfuerzos por reanimarla fueron inmediatos, pero infructuosos. Cuando lograron sacarla del agua, ya no presentaba signos vitales. El dolor, tan profundo como inesperado, se apoderó del ambiente. Miradas perdidas, llanto contenido y un silencio abrumador marcaron el resto del día. Autoridades municipales y de protección civil acudieron al lugar para tomar conocimiento de los hechos y dar inicio a las diligencias correspondientes. Hasta el momento, la institución organizadora no ha emitido un comunicado oficial, aunque se prevé una investigación para deslindar posibles responsabilidades.